Obviedades

"P" es alguien muy particular. Tiene un pelo largo y lacio que me gusta mucho y cara de niño. Es serio por lo general, pero cuando algo le causa risa realmente, ríe de una manera tibia y natural que me enternece. Es mas joven que yo por pocos años, tal vez solo uno, pero siento que tiene un misterio milenario, aunque el no lo sepa y sea imposible de comprobar. Su amor es la música: vive componiendo, estudiando, disfrutando. Se queda hasta altas horas de la noche con ella y las veces que lo vi tocar pude observar que se hacia grande y que toda esa timidez que lo rodea siempre desaparecía de repente. El y su instrumento son uno en el escenario, logran armonizar muy bien y causan en mi ese hechizo que me abarca cuando contemplo algo bello y logrado. "P" diseña también. Pero casi nunca esta conforme con lo que hace en ese rubro, aunque a mi parecer es bastante bueno. Es muy sensible a lo estético. Pero lo que mas me gusta de "P" es que es muy cordial. El piensa mucho y cada palabra que dice es tranquila y ubicada por lo general. "P" odia que se hable de él. Es demasiado tímido para soportarlo y no le gusta ser centro de atención. De hecho dirá seguramente que la mayoría de lo que escribo sobre él es irreal e inexacto. No me preocupa, pues nunca nada le parece del todo exacto. Tiene siempre la duda del que se sabe pequeño frente a algo más, del que sin entenderlos es consciente de los misterios y lo inabarcables que son para nuestra mente. De ahí algunas de las discusiones/conversaciones que hemos compartido y que disfrute mucho. Ayer me entere de que "P" tiene algo. Una enfermedad, o algo así. Aun no se sabe bien que es y no es grave, pero me dio un frío al saberlo y en un instante entendí lo importante y querido que es para mi. No es que no lo supiera, mas bien lo daba por sentado. "Es obvio" diría cualquiera. Pero no se si es tan asi. Es extraño como necesitamos de ciertos signos para darnos cuenta de algo tan básico.