lunes, 26 de enero de 2009

fantasmas de antaño

fotografía de: www.flickr.com/photos/berkelium
Sofía se desafía hoy mismo. Nunca lo logra, jamás tuvo éxito, pero hoy está dispuesta. Sufre desde epocas remotas una maldición que acecha su alma, la carcome y la obliga a anidar siempre en un corazón ajeno, para soportar entre dos el peso del suyo. ....................................................................................................................................................................... Sucede que Sofía no soporta estar sola. Nunca nadie le enseñó cómo, y cuando cree poder, de nuevo siente ese pinchazo dentro, y una melancolía insoportable se apodera de ella. No sabe qué anhela. Nunca supo exactamente quien se llevó su soledad... pero lo cierto es que no la tiene consigo y no logra recuperarla. ....................................................................................................................................................................... Fue un frio septiembre cuando aconteció la peor de las batallas, aquella en que su corazón sangró por 7 días y 7 noches. Creyó poder vencerla, realmente tuvo confianza y fé en que lo lograría... pero el dolor fue mas intenso aún: desde entonces hechó de menos viejos amores, antiguas ideas, besos que ya se habían evaporado... y se sintió mas pequeña que nunca, vió paredes agrandarse ante sí y ella ahí, sin poder hacer nada para rescatar su mente y su alma de aquella tortura........................................................................................................................................................ Recuerdos, anhelos de cosas que jamás serán, aromas, la imágen de aquel cálido abrazo de despedida, aquella mentira que irió su costado para siempre y que volvía a sangrar. ....................................................................................................................................................................... Pero no. No volvería a caer. Necesitaría todas sus fuerzas esta vez... vencería o moriría en el intento. Soportaría el dolor en la boca del estómago, las lágrimas que la recorrerían por última vez y derrocaría a la melancolía de una vez por todas... o caería rendida y se entregaría para ser su compañera para siempre....

miércoles, 21 de enero de 2009

¿torpe yo? mucho.

Paré el colectivo y dejé un dedo en la puerta. Subí las escaleras, miré las ojotas y el escalón me miró la pera. Tuve sed, y tome algo (después de limpiar lo derramado anteriormente, claro). A esa altura ya comencé a lanzar hipótesis sobre los porqués de este estado y fue ahí cuando en un ataque de cariño abracé a mi madre que se iba... se iba, pero se quedó porque me al dejar de abrazarla me clavé la punta de una mesa en la espalda... evidentemente mis sentidos no conectaron hoy o algo se desfacható dentro de mi cerebro y se llevó mi coordinación a pasear... la cosa es que estoy torpe, torpe y con sueño.... creo que es eso, sueño... o, tal vez, las cosas se dan por algo y estoy pagando alguna venganza por alguna maldad olvidada... o mejo aún.. tal vez, algo o alguién que no veo me mueve y busca que me golpee y quede como tarada y se alegra viendome buscar mil y un motivos para escusar mi inusual y encarnizada torpeza.

viernes, 16 de enero de 2009

regreso.

[...] fue entonces cuando vi pasar una nube negra sobre esa ciudad. A tanta altura, todo lo urbano y su movimiento se veía reducido a luces blancas, naranjas y rojas que titilaban en la oscuridad. Me parecia estar descubriendo una maravilla oculta en algo cotidiano, era sencillamente hermoso ver tanto y desde tan alto....... nada mejor que volar, para terminar unas vacaciones. En el tiempo que estuve mirando nubes que mutaban su color según transcurría el día, reviví algunas cosas de este verano, como para guardarlas en algún lugar de mi. (es que son vitales para poder soportar el intenso año que me espera). Recordé aquel rincón escondido en una gruta de piedras donde, cuando todos pasaban sacando fotos y desparramando gritos, me detuve y pude percibir una mirada profunda escondida y un aroma a misticidad que envolvía todo ........................................................... Busqué también ese intenso sentimiento de pequeñez que me invadió cuando, recostada en el pasto y con el recuerdo del cerro en la retina, cerré los ojos y escuché el viento envolviendo todo el lugar.............................. Volví a aquellas páginas que recorrí y a los múltiples lugares a los que me llevaron, los personajes que sufrí y aquellos con los que me identifiqué...................................................................... Sentí de nuevo ese gusto salado en la garganta previo al llanto, el mismo que tuve al ver en lo que se había convertido aquel milenario lugar, al ser conquistado por españoles y regados con sangre aborigen... conocer la historia de aquellas tierras duele.... pero también atesoré esa angustia. (al parecer, es sano guardar un poco de eso también) ................................................................................ Descansé, reí, descubrí cosas nuevas al mirar por dentro y por fuera. Pude frenar el cuerpo y hechar a rodar mente, alma y corazón... y realmente extrañaba eso. Y acá estoy de nuevo, hecha palabras... cíclico no? (^-^)