
Ya 24. Para ella es
muy agradable cumplirlos. Son días que invitan a pensar sobre uno, sobre "cómo
va la vida". Y ella está chocha arriesgó la nona alguna vez. Con
hormiguero nuevo y mimada por varios se dispuso a celebrar. A su tiempo, no muy
organizadamente, pero con ganas, dejándose llevar cual barquito de papel por la
canaleta. Y fue así como, rodeada de deseados "Macanudos", con una
cena de viernes sorpresiva y encantadora, con besos cálidos, una bolsa de
buenos deseos y un "regreso a la infancia" en el parque, se pasaron
las horas del primer día de su nuevo año de vida. . . . . . . . . A la hora de
las palabras una sola se escapó del montón que se le ocurrían: Gracias. (y es
que todas parecían poco para tanta cosa linda vió...)

